11/02/2025
Queridos clientes, amigos y responsables de animales de compañía:
El próximo 11 de febrero, a las 11, nuestra clínica realizará un cierre parcial de actividad como protesta ante la grave situación que atraviesa la profesión veterinaria en España.
Este acto forma parte de movimiento nacional para exigir reformas urgentes que garanticen la calidad del servicio y bienestar de los animales.
¿Por qué hemos llegado hasta aquí?
Desde hace años, los veterinarios hemos enfrentado una acumulación de normativas y medidas que dificultan nuestro trabajo, poniendo en riesgo la salud de vuestros animales de compañía, que son parte de nuestras familias y nuestra sociedad.
Ahora, con el Real decreto 666/2023, la situación ha llegado un punto insostenible. Este decreto, lejos de mejorar el sistema, limita drásticamente nuestra capacidad para ejercer una medicina veterinaria de calidad.
Nuestras principales reivindicaciones son las siguientes.
Uno. Libertad de criterio clínico.
El decreto nos obliga a restringir los tratamientos a lo que figuren las fichas técnicas de los medicamentos, ignorando nuestra experiencia, conocimiento, la evidencia científica y los avances médicos. Esto afecta directamente a la salud de vuestros animales, impidiendo que reciban el tratamiento más adecuado para sus enfermedades.
Dos. Acceso a tratamientos farmacológicos.
La normativa actual dificulta que podamos dispensar medicamentos directamente en nuestras clínicas. Esto obliga a los propietarios a buscar los medicamentos en farmacias. Muchas veces no los tienen, no hay formatos adecuados o se entrega más cantidad de la necesaria. Esto retrasa el inicio del tratamiento, fomenta el desperdicio, la automedicación y el riesgo de resistencias antibióticas.
Tres. Contra el exceso de burocracia.
Estamos obligados a notificar cada gota, pastilla o inyectable de antibiótico que utilicemos o recetemos. Esto, además de ser inútil totalmente, aumenta la carga administrativa restándonos tiempo para lo realmente importante cuidar de vuestros animales.
Cuatro IVA del 21%
Desde 2012, el IVA de los servicios veterinarios se incrementó del ocho al 21% considerándonos un lujo. ¿En serio la salud de una parte de nuestras familias es un lujo? ¿No es esencial?
Cinco. Sanciones abusivas
Toda esta burocracia además conlleva sanciones de hasta 1.200.000€. Por errores administrativos. Por equivocarnos en un dato. Por no comunicar un antibiótico. Y nos sancionan también por no poder justificar a que paciente hemos administrado cada uno de los tratamientos que ponemos a diario.
Seis. La cascada…
Suena bucólico y relajante. Pero no lo es. La cascada significa que si existe un medicamento veterinario en cualquier país de la Unión Europea, pero no en España, no podemos recetar el equivalente de medicina humana. Sino intentar traer desde.. ¿Chipre por ejemplo? ese medicamento, pagar el alto coste, esperar un tiempo que igual no tenemos y dejar a nuestro paciente mientras sin tratamiento.
¿Por qué es importante esa protesta?
Lo que está en juego no es solo nuestra capacidad de ejercer la profesión Vetetinaria, de manera ética y profesional, sino también la salud y el bienestar de nuestros pacientes y por último la salud pública, de la que somos garantes en la sombra.
Cada día trabajamos para ofrecerle la mejor atención posible, pero estas normativas nos están atando las manos y poniéndonos barreras insalvables. Además, esta situación incrementa los costes de los tratamientos y dificulta el acceso a ellos, especialmente en zonas rurales .
Este 11 de febrero a las 11 nos sumamos al paro nacional, promovido por asociaciones veterinarias de toda España. Este acto simbólico tiene como objetivo hacer un llamado a las autoridades para abrir un diálogo que permita corregir estas injusticias y trabajar en favor de la salud animal. De una sola salud.
Agradecemos vuestra comprensión y apoyo nuestra lucha no es solo por nosotros, sino también por vuestros animales, para que puedan seguir recibiendo los cuidados que merecen.