19/04/2024
Es uno de los iconos más antiguos de Estambul, está rodeada de misterio y se encuentra en medio del mar, en una zona rocosa muy próxima a la orilla. Se trata de la Torre de la Doncella o Torre de Leandro, más conocida por los turcos como Kız Kulesi.
La luz de su faro ilumina el puerto de Estambul y aporta, de noche, a la idílica estampa del Bósforo un plus de belleza y encanto. Una visita imprescindible en los viajes románticos a Estambul.
Está documentado que, donde hoy se halla la Torre de la Doncella, en el año 1110 el emperador Alejo I Comneno construyó una torre de madera rodeada de un muro de piedra que estaba unida por una cadena de hierro a otra edificación de la costa europea de Constantinopla.
Y que dicha torre también estaba conectada con la costa asiática mediante una muralla, cuyos restos son todavía visibles hoy.
Conocida también como Torre de Leandro al relacionarse con la leyenda de Hero y Leandro, esta construcción quedó destruida por un terremoto que tuvo lugar en 1509 y, tras su reconstrucción, se incendió en 1721.
Desde entonces, se ha utilizado como faro, aunque después, desde 1829, la torre fue usada como un hospital de cuarentena, aduana, casa de retiro de oficiales turcos, estación de radio y cuartel.
La penúltima restauración de la torre tuvo lugar en 1998 para rodar allí la película de James Bond El mundo nunca es suficiente y, tras el terremoto de 1999, se reforzó con una estructura de acero para evitar daños en la edificación.
Los últimos trabajos de restauración iniciados por el Ministerio de Cultura y Turismo de la República de Turquía en 2021 finalizaron en mayo de 2023 y reabrieron a los visitantes 01 de Marzo de 2024.
Hay muchas leyendas sobre la construcción de la Torre de la Doncella y su localización. Según la leyenda turca más popular, un sultán tenía una hija muy querida y un día, un oráculo profetizó que sería asesinada por una serpiente venenosa en su 18º cumpleaños.
El Sultán, en un esfuerzo por impedir la temprana muerte de su hija colocándola lejos de la tierra para mantenerla alejada de las serpientes, construyó esta torre en medio del Bósforo para proteger a su hija hasta su 18º cumpleaños. La princesa se instaló en la torre, donde era visitada frecuentemente solo por su padre.
En el 18º cumpleaños de la princesa, el sultán le llevó una cesta de uvas como regalo, contento de que había sido capaz de evitar la profecía. Sin embargo, al coger la cesta, una víbora muy venenosa que se escondía entre las uvas mordió a la joven princesa y esta murió en los brazos de su padre, justo como había predicho el oráculo. De ahí el nombre Torre de la Doncella.