04/06/2015
Ciclo Sexual en las hembras
CICLO ESTRAL
La mayoría de las veces los propietarios de perras se enfrentan a un gran dilema conocido como el “celo”.
Desgraciadamente es poco lo que se les informa a los propietarios acerca de las diferencias entre los perros y las perras, como son: el manejo, los cuidados y finalmente toda la información mínima indispensable sobre este suceso.
Para poder comprender bien el tema es importante dejar claro que las perras NO menstrúan como las mujeres. El sangrado que presentan es solo parte fisiológica de la etapa del celo o ciclo estral. En las perras este ciclo estral se divide en 4 etapas.
1ª etapa EL PROESTRO: dura de 3 a 20 días, en esta etapa se observa que los machos se sienten atraídos hacia la perra, existe un aumento en el tamaño de la v***a y la región perineal (la parte trasera de las hembras por debajo de la cola) así como un sangrado que se origina en el útero, aunque pueden observarse también secreciones vaginales.
2ª etapa ESTRO: En este periodo se presenta la ovulación; es decir, que la perra puede quedar gestante en caso de aparearse con un macho. La duración es de 3 a 20 días; la conducta de la hembra es aceptar al macho y puede o no seguir presentando sangrado v***ar.
3ª etapa DIESTRO: La duración es de 63 días en perras gestantes y de 100 días en perras no gestantes. En esta etapa la perra no muestra interés alguno por lo machos ni estos por ella.
4ª etapa ANESTRO: La cual tiene una duración de 3 a 9 meses. Esta etapa es excluida por algunos veterinarios como parte del celo, ya que no hay una actividad hormonal marcada, ni muestra signos. En esta etapa la perra tampoco muestra interés por los machos, ni estos por ella.
Es importante entender que no es una regla de oro que todas las perras empiecen su primer celo exactamente a los 6 meses y este sea el mismo intervalo entre celo y celo. Al igual que en las mujeres, no todos son exactas y la menstruación no dura exactamente lo mismo. En las perras la presentación del primer celo puede variar; ya que puede ir de los 4 meses al año o año y medio de edad y como consecuencia el intervalo entre celo y celo puede variar. Esta diferencia radica entre la raza, peso, estadio nutricional, medio ambiente, genética o enfermedades.