18/10/2021
Una explicación de por qué no debemos realizar ejercicio físico intenso con cachorros hasta los 18 meses e incluso los 24.
Las tasas de crecimiento de los cachorros varían mucho según el tamaño. Es importante adaptar la dieta y el ejercicio a los requisitos específicos de su cachorro para garantizar un desarrollo esquelético ideal. La osificación endocondral (el proceso durante el cual el cartílago se convierte en hueso) difiere según el tamaño adulto de su cachorro, con placas de crecimiento cerradas (se ha producido la osificación completa) entre los 3 meses en las razas de juguete y los 24 meses en las razas grandes.
Hay muchos factores que afectan la tasa de crecimiento y la edad de madurez, por ejemplo, los machos maduran más lentamente que las hembras. Existen variaciones en los períodos de "crecimiento rápido" que van desde el nacimiento hasta las 11 semanas en perros pequeños y juguetes. Las razas grandes varían desde el nacimiento hasta las 20 semanas (Hawthorne et al 2004). El ejercicio excesivo y la nutrición inadecuada durante estos períodos pueden conducir a la conformación y malformación de los huesos, lo que puede conducir a la osteoartritis y la enfermedad degenerativa de las articulaciones.
Los niveles de ejercicio recomendados para cachorros son 1 minuto por cada semana de su vida, dos veces al día. Esto debería ser de bajo impacto a un ritmo constante.
Si su objetivo es entrenar para competir por el flyball o la agilidad (por ejemplo), se recomienda evitar cualquier entrenamiento de salto hasta que se haya producido la osificación completa.
Esto es lo que queremos decirle que no se apresure con sus cachorros, trabaje otras cosas con ellos. Trabajan sus mentes, huelen, se preocupan por socializar, etc.
Tras pasar los meses de desarrollo y confeccionando las placas correspondientes, consulta con tu veterinario si tu perro es 100% deportivo.