30/03/2024
Conoce Mi Historia
Hola creo que vieron mi fotografía en las redes, algo que por poco me cuesta la vida.
Esta es mi historia, fui el producto de la irresponsabilidad de un ser que no se si me abandono a mi suerte, o fui robado de mi hogar, pero creo que mi vida no era tan bonita pues como a muchos de los Pit Bulls nos consideran perros potencialmente peligrosos, algo que no debería ser así, pues al nacer nacemos igual de inocentes a un recién nacido y de adultos nuestra mentalidad llega a la edad de un niño de 5 y 7 años, por lo tanto, no tenemos maldad.
Con exactitud no sé cuánto tiempo estuve atado a una cadena, que tendría un peso aproximado entre 3 a 5 libras, quizás para ustedes poco, para un perro como yo mucho. En mi cuerpo pueden ver mis costillas, no recuerdo ni cuanto comía, ni que me daban, solo puedo decir que no me gustaba escuchar el sonido de los tazones de metal, mucho menos recordaba que era una comida limpia y sin basura.
Un 23 de marzo aparezco en las redes, ya que termine atado en el ingreso a la estación de bomberos voluntarios de la Antigua Guatemala, creo fui dejado allí por alguien que jamás fue mi familia, y que mi amor incondicional de nada valió, porque me traiciono abandonándome a mi suerte, de todo podía leerse en las redes, desde que había mordido a alguien, hasta que era un perro peligroso, y que debían matarme, que animales como yo, ya no podían corregirme, y no entiendo si no me conocían.
Llamaron a todos los lugares, para ver quien me rescataba, era triste ver el espectáculo en las redes, de todo había, desde gente que pedían ayudarme, pero no llegaban a darme un pedazo de pan o llevarme agua, hasta los que pidieron dinero para ayudarme, algo que jamás hicieron y los entiendo estoy marcado por una sociedad injusta, como un animal de raza peligrosa.
24 de marzo, el señor Rember que tenía su preocupación, por todo lo que decían en las redes, y entre parqueos y procesión de mi creador, ¡Domingo de Ramos! cualquiera se pone nervioso, pero creo que tuve una ayudadita de San Francisco de Asís, y a este señor se le ocurre llamar a Sol y Luna, y de allí una luz de esperanza entro a mi vida.
Un alma caritativa me llevo un poco de agua, sé que tenía miedo porque soy un Pit Bull, pero calmo un poco mi sed. Después llega una dama, con corazón noble pues también ayuda a callejeritos de nombre Diana y me trajo más agua, y un poco de comida. Creo que mis deseos se iban cumpliendo, a pesar de lo que piensa alguna gente, que los perros no tenemos sentimientos, y deseos, y no es así, porque los perros de la calle tenemos deseos de encontrar un hogar.
Ese día un señor entre cara de enojado y amistoso vino porque venía a ver según él, como era el panorama y que tan peligroso yo era, y cuando coloco su mano en mi cabeza, supe que allí estaría seguro, desde ese momento mi vida cambio y supe que podría confiar en Manuel.
Voy superando día a día mis miedos, mis incertidumbres de que pasara conmigo. Hoy sé que tengo una nueva oportunidad, de quizás de tener una familia para toda la vida, hoy se que las caricias que recibo son de corazón, y que no debo dejar de tener ese amor incondicional hacia los humanos, porque no todos son malos, ni todos nos ven como animales peligrosos.
Gracias a Señor Rember por esa llamada, por colocar custodios, para que no me hicieran daño, gracias a la señora Diana Vielman por ese alimento con amor que me llevo, gracias a el Manuel Morales, por ver mi vulnerabilidad y tener la valentía de llevarme para el Refugio Sol y Luna., mil gracias aquellos que fueron y me dieron un pedazo de pan y agua, en los momentos mas oscuros de mi existencia.
El 27 de marzo a las 3:15 de la tarde fui liberado de las cadenas que no sé por cuanto tiempo las tuve. Nadie merece vivir así.
YO NO SOY UN PERRO PELIGROSO; YO SIMPLEMENTE SOY CANELO.