02/07/2022
Qué es la huella de carbono?
El impacto de una taza de café negro es, en realidad, bajo. Su huella de carbono no supera los 20 gramos de CO2 equivalente. Si tomamos un capuchino con leche de vaca, sin embargo, sus emisiones se multiplican por 40. Mientras tanto, la misma versión italiana del café con leche, pero hecha con una bebida vegetal de soja, divide su huella de carbono entre siete.
Lo expresamos en CO2 equivalente porque hay muchos gases de efecto invernadero, cada uno con un efecto diferente. El más abundante de estos gases es el dióxido de carbono (CO2) y por eso se ha quedado como representante. Pero, por ejemplo, el metano tiene 25 veces más potencial de calentamiento global.
La huella de carbono se define como la cantidad de gases de efecto invernadero, expresada en Co2 equivalente, emitida a la atmósfera, por un individuo, una organización, un proceso, una mercancía o un evento, dentro de un límite temporal específico.
Mientras que;
El presupuesto de carbono establece la cantidad de carbono que puede emitir una economía durante un periodo determinado para cumplir los objetivos climáticos y de reducción de emisiones.
En los países de la Unión Europea, el 25 % de las emisiones de gases de efecto invernadero tiene su origen en el consumo energético de los edificios. La gran mayoría de ellas, el 64 %, proviene de los combustibles usados para calefacción.
La huella de carbono 🍀 🌿es uno de los mejores indicadores y, sin duda, el más popular para medir las emisiones. Sirve para saber cuál es la contribución de una persona, de un producto, de una empresa o un país al cambio climático.
La responsabilidad del cambio climático se atribuye a los países en función de sus emisiones a lo largo de la historia o de las que están generando en la actualidad. Y los objetivos de las políticas climáticas que fija cada país y las estrategias de mitigación se establecen en función de esas emisiones.
A nivel mundial, cada persona genera anualmente 4,48 toneladas de CO2eq. En España son 5,5, en Estados Unidos 15,2, en Argentina 4 y en Costa Rica 1,7. La mayoría de países de África están por debajo del 0,5, según datos del Banco Mundial.