31/12/2019
Aunque se los considera sinónimos de fiesta y alegría, los fuegos artificiales provocan consecuencias perjudiciales para el medio ambiente, desde ruidos y contaminación a alteración del comportamiento de la fauna e incendios forestales.
Problemas que vienen incrementándose, en la misma proporción que la cantidad de materiales pirotécnicos usados en las exhibiciones actuales. Y lo peor de todo, para su fabricación se utilizan sustancias como el perclorato de potasio o amonio, que tras las explosiones se concentran en las aguas próximas a la realización de los espectáculos.
Si tienes compañeros animales, seguramente conoces su reacción ante la explosión de los fuegos artificiales. Los animales silvestres también sufren los mismos trastornos .
Por esto y mucho más, le decimos NO A LA PIROTECNIA.