"Mis gatos se han peleado al volver del veterinario", es una de las consultas más frecuentes y también una situación que se puede evitar fácilmente. Cuando uno de los gatos debe ir a la clínica, pasa por mucho estrés, un estrés que comienza en casa y no termina hasta que vuelve y se vuelve a sentir seguro. Para sentirse seguro, necesita lamerse, lavarse, recuperando así su propio olor (feromonas), que son las feromonas que el otro gato reconoce, así como su estado de ánimo tranquilo como si no pasara nada. Pero cuando vuelven de la clínica, huelen a feromonas de alarma, lo cual alerta y asusta al otro gato, además de tener un lenguaje de estrés y miedo, lo cual también alerta al otro gato. Como su olor y actitud son diferentes, el otro gato de primeras no lo reconoce del todo o ve algo raro, y por eso se asusta y lo ataca, pudiendo convertirse en un problema grave entre ellos. Así que es mejor evitarlo dándoles tiempo para reconocerse, y si de primeras no es así, lleva al gato que ha salido a una habitación hasta que recupere su olor y su actitud segura, y así el otro gato lo reconocerá y no se asustará. Y ante la duda, deja que se vean al principio con alguna protección y así puedes comprobar si se reconocen y está todo bien o no. Mis gatos son muy equiibrados los dos por tanto no tengo problema pero aún así les doy ese momento como ves en el vídeo. Si tienes cualquier duda escríbenos a [email protected] ❤️
Espero que este vídeo os aporte algo útil.
Gracias!
Laura Trillo
www.terapiafelina.com
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