12/10/2016
TUMORES DE MAMAS EN PERRAS
Durante el mes de octubre, en todo el mundo, tiene lugar el Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama para aumentar la atención que se le presta a esta enfermedad y difundir información sobre la importancia de la detección precoz, sobre el tratamiento y los cuidados paliativos en los seres humanos.
Nuestras mascotas también pueden sufrir esta enfermedad. Por eso, te acercamos toda la información que necesitas saber al respecto para poder prevenir que esto le suceda a tu amigo de cuatro patas y qué hacer si la padece.
¿Qué es un tumor?
Es un agrandamiento en una parte del cuerpo, es decir, una masa anormal de tejido. Esta protuberancia puede ser benigna o maligna. Cabe aclarar, que es sinónimo de neoplasia.
¿Qué es el cáncer?
Cuando hablamos de cáncer, hablamos de una enfermedad en la que las células se dividen descontroladamente y además invaden otros tejidos a través de vía sanguínea o linfática. El origen de esta enfermedad es un tumor maligno.
¿Puede afectar a nuestras mascotas?
Sí. En el caso de los animales, se han encontrado tumores de glándulas mamarias en diferentes especies. Pero su aparición es muy frecuente en perros y gatos, aunque en el caso de los gatos su incidencia es menor pero suele ser más agresivo.
Por lo general, estas neoplasias se presentan en las hembras. Pero no hay que descartar la presencia de tumores mamarios en machos, aunque realmente su incidencia es muy baja.
En el caso se las perras, los tumores mamarios pueden ser benignos o malignos y la presentación clínica puede presentarse en una o varias mamas. Y el 50% de los tumores suelen ser malignos.
¿Por qué aparecen?
Existen varios factores que determinan la aparición de tumores. Entre ellos se encuentra tanto el genético como el hormonal, por eso algunos profesionales sugieren esterilizar a los animales antes del primer celo, así como también reemplazar las pastillas anticonceptivas por la ovariectomía (extirpación de ovarios), para disminuir el riesgo de aparición de este tipo de neoplasias.
Otros factores que también pueden incidir negativamente son: La pseudo preñez recurrente y las dietas de baja calidad con exceso grasa, porque aumentan la tasa de estrógeno y prolactina.
La presencia de un tumor hace que se vea afectado el sistema reproductivo y con posibilidad de desarrollo de metástasis (ramificación) en las vías respiratorias, tejido nervioso, etc.
¿Cuáles son los signos y síntomas?
Los tumores se suelen presentar como masas en las glándulas mamarias. Pueden ser de movimientos libres o fijos. A veces llegan a ulcerarse, por lo que es importante evitar los lamidos. También puede observarse en algunos casos una secreción serosa a hemopurulenta.
¿Cómo se puede tratar?
Si detectamos o sospechamos que nuestra mascota tiene un tumor mamario, tenemos que hacer una visita a nuestro Médico Veterinario lo antes posible. Seguramente le realizará una placa de tórax y/o ecografía abdominal, para descartar posibles ramificaciones tumorales, es decir, metástasis, y decidirá cuál es el mejor tratamiento a implementar.
En general, el tratamiento elegido es el quirúrgico y muchas veces se complementa con quimioterapia.
La radioterapia se utiliza como coadyuvante de la cirugía, o en los casos en que no sea posible extraer el tumor o se lo quiera reducir antes de la resección quirúrgica.
La inmunoterapia es otra alternativa interesante ya que estimula al sistema inmune, con el objeto de inhibir el crecimiento del tumor.
Por supuesto que en esta etapa el animal deberá recibir una alimentación de muy buena calidad con proteínas de alto valor biológico y bajos niveles de grasas.
Y no te olvides, ¡es muy importante que vayas al Médico Veterinario de cabecera, si detectas la posibilidad de un tumor mamario en tu amigo de cuatro patas!