12/08/2024
Gracias por la nota y por tanto cariño!
“Hace tiempo que el animal es un miembro más de la familia y ocupa otro rol en la vida de las personas”
Valeria Peluffo, quien junto a Francisco Zuccardi dirige la Veterinaria “La Yunta”, contó a La Opinión cómo ha cambiado la mirada sobre las mascotas y brindó algunos consejos para quienes tienen pensado sumar al hogar un pequeño animal.
Ubicada en calle Wilde 270 desde hace unos siete años, Veterinaria “La Yunta” se ha convertido con el correr del tiempo y a fuerza de mucho trabajo, dedicación y capacitación, en una referencia de la actividad en Trenque Lauquen. Allí, los médicos veterinarios Valeria Peluffo y Francisco Zuccardi desarrollan su actividad atendiendo a pequeños y grandes animales.
En diálogo con este medio, Peluffo comentó las características del servicio ofrecido el cual es muy solicitado por una amplia clientela y no deja de crecer con el correr de los años.
En primer lugar, la entrevistada hizo un breve repaso de su historia en la profesión: “Soy veterinaria desde hace 10 años –contó-. Desde muy chiquita quise ser veterinaria, terminé la escuela y me fui a estudiar. Soy de Rosario, me fui a estudiar a Casilda que queda cerquita de Rosario, hice toda mi carrera ahí, después empecé a trabajar en esta zona en un campo y luego decidimos abrir una veterinaria en Trenque Lauquen”.
Grandes y chicos
Y agregó que en “La Yunta” “somos dos veterinarios. Mi marido, quien hace la parte de grandes animales, y yo que me dedico a pequeños. Tengo un consultorio exclusivo de felinos que es en lo que me estoy especializando, pero hago todo, perros y gatos”.
La médica veterinaria contó que “en Trenque Lauquen hace nueve años que estamos trabajando, estuvimos primero en otra dirección y acá, en calle Wilde, estamos desde hace siete años”.
Y destacó que la citada avenida “es una calle muy linda, muy transitada, con mucho movimiento. Antes estábamos en una zona no tan comercial y este lugar es muy lindo, hay mucho más movimiento”.
Felinos
Un aspecto importante de destacar en el servicio de “La Yunta” es que, como ya fue señalado, cuenta con un consultorio felino. “Se nota que a estos animales le están dando un poco más de lugar en la familia. Antes el gato era como un animal que andaba por ahí suelto y de golpe aparecía sólo para comer. Hoy eso cambió y yo estoy tratando de especializarme en esa especie y logré hace poco, con un par de reformas de la veterinaria, hacer un consultorio exclusivo para felinos que minimiza mucho el estrés en la consulta del gato porque el animal no siente los olores de los perros y es un consultorio que está adaptado para disminuir ese estrés y nos permite trabajar de una manera más eficiente y mejor, sobre todo en una especie tan estresable como es la del gato”, dijo antes de agregar que “es algo que hace mucho quería hacer y se nota mucho la diferencia a la hora trabajar de esa manera”.
El movimiento
Respecto del movimiento actual, la entrevistada comentó que hay un freno notorio a causa del complejo presente económico que se vive en el país por estos días y que lleva ya largos meses y años. “Se nota un poco el parate. En lo que es clínica no ha disminuido tanto el trabajo, pero sí en la prevención. En todo lo que es vacuna y desparasitación yo noto que hay una disminución, como que se ha recortado un poco ese gasto en todo lo que no es esencial y es entendible porque estamos pasando un momento muy crítico, entonces se recorta en lo que se puede. Si el perro está con algo complicado lo traen, pero todo lo referente a lo preventivo no se está haciendo”, comentó.
Mayor conciencia
Peluffo destacó la manera en que hoy las personas tratan y atienden a los animales. “Hace unos cuantos años que todo cambió y el animal ya es un miembro más de la familia y ocupa otro rol en la vida de las personas. Hoy es todo muy diferente” dijo antes de brindar algunos consejos para todos aquellos que tienen intenciones de adoptar una mascota quienes, muchas veces, no son del todo conscientes de lo que implica sumar un integrantes de estas características a su familia.
“Hay que evaluar la cuestión económica, también el tiempo y el espacio para criar a determinada mascota, es decir, todo lo que implica la tenencia responsable, hacerse cargo del animal en todos los aspectos. Porque no es cuestión de adoptar un perro y después dejarlo siempre en la calle. Es importante saber que se cuenta con el lugar y con el tiempo para pasearlo, lo que es alimentación, sanidad, vacunas y desparasitaciones, preguntarse si tengo la posibilidad de hacerlo ver y atenderlo si le pasa algo. Sobre todo eso. Pensarlo todo antes y no tomarlo tanto a la ligera al hecho de adoptar un cachorrito”. “Porque quizás no se asesoraron a tiempo y luego es un cachorro que se hace muy grande y genera problemas en la casa. También estar atentos a la sociabilidad de un cachorro, de hacerla bien, porque después terminan siendo perros agresivos o que nadie los puede sacar a pasear porque son muy grandes. Es decir, pensar y asesorarse antes de llevar a cabo una adopción”, indicó.
En la calle
En este sentido, recordó que “durante la pandemia se trabajó al principio con dificultad porque a determinada hora no podíamos salir y teníamos que contar con un permiso. En ese tiempo la gente le prestó atención a sus mascotas, más quizás que en otras oportunidades porque muchas personas estaban sin trabajar en su casa y en compañía de su perro. También se dieron muchas adopciones durante la pandemia, sobre todo gatos, eso fue bastante característico, quizás como entretenimiento para los chicos para estar más acompañados”.
No obstante, comentó que “también ocurrió que muchos perros terminaron en la calle. Fue como una oleada de adopciones y después una oleada de más perros en la calle que los que teníamos”. En En este punto, señaló que “hoy se ven muchos perros en la calle, se ha avanzado mucho con el trabajo de las protectoras, pero se siguen viendo perros en las calles y todo pasa por la educación, de cómo llevar a cabo una buena tenencia responsable”.
Volviendo a la pandemia, Valeria recordó que ese fue un momento muy complejo. “Sobre todo para los gatos fue bastante estresante porque había dueños que no estaban en todo el día y de golpe estaban en casa. Para algunas especies fue más difícil que para otras, pero creo que la pandemia fue un cambio para todos en general, y también para las mascotas”.
Razas peligrosas
Ante la consulta sobre las llamadas “razas peligrosas” y si la raza es un determinante para que un perro sea o no agresivo, la veterinaria explicó que “va más en una falta de conocimiento de nosotros como tutores. Si bien hay razas que tienen una conformación anatómica a través de la cual pueden generar más daño, la realidad es que cualquier perro que no está bien sociabilizado es un riesgo, por más que sea un Golden. Si es un perro al que nadie le dio bolilla, quedó atado en el patio, cada vez que viene familia o amigos se lo ata en el fondo, ese va a ser un perro que va a reaccionar diferente que otros que fueron tratados de distinta manera. Pero está todo en asesorarse, hacer las cosas en su debido momento”.