07/10/2021
UNA CUESTION DE PASEO
Cada día vemos mucha gente pasear con su perro, pero siete de cada diez lo hacen sufriendo. El perro tira hacia adelante o hacia los costados, salta sobre la gente u otros perros, ladra y se enfrenta con los perros que están en las rejas de las casas, o simplemente, se planta y no quiere caminar. Todo ese tipo de problemas que se presentan insta a que el dueño desista de salir a una caminata con el perro.
Ahora bien, el paseo no es solo caminar un ratito para que el can haga sus necesidades, sino también es que es un buen ejercicio para ambos. Con un buen itinerario de unos treinta a cuarenta y cinco minutos, el perro tiene sus sentidos trabajando investigando todo lo que se mueve, brilla, suena y huele mientras camina, siendo que su mente trabaja para procesar toda esa información, le produce un relajo y calma sus ansiedades. Mientras más enérgico sea en ritmo, mejor será su ejercicio físico.
Por otro lado, al ser humano le da prácticamente los mismos beneficios. En medicina recomiendan como muy buen ejercicio, más aun si no se practican deportes en la semana, una caminata enérgica en ritmo de media hora diaria. ¿Y qué mejor que hacerlo acompañado por tu perro?.
El problema surge cuando el perro es complicado, pues, la manera correcta del paseo es que nuestro amigo de cuatro patas debe seguirnos a nosotros y no al revés, debe ir a nuestro ritmo, parar cuando nosotros nos detenemos y debemos ser su mayor estímulo.
con unos pocos ejercicios, tu desorejado amigo, puede convertirse en el mejor acompañante en una caminata.
Si querés saber cómo hacer para que el paseo deje de ser un in****no y se convierta en un momento agradable, llámanos que te guiamos en tu hogar para resolverlo.
M.H.
😉
