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27/01/2025
No Más Violencia Hacia los Veterinarios: Juntos Somos Más Fuertes
Recuerdo claramente la primera vez que fui amenazada. Me dijeron que me harían daño físico, que dañarían mi negocio y que publicarían injurias contra mi nombre. Fue un momento profundamente difícil. Me sentí vulnerada, impotente y rota como profesional. No podía entender cómo, dedicándome a cuidar y salvar vidas durante mas de 15 años, podía convertirme en el blanco de tanta agresividad.
En mi confusión y tristeza, le conté a un amigo lo que estaba viviendo. Su respuesta me marcó profundamente: “Eso solo te pasa a ti”. Esa frase quedó grabada en mi mente. ¿Era realmente así? ¿Era yo la única veterinaria enfrentando este tipo de violencia?
Con el tiempo, decidí buscar respuestas. Me embarqué en una investigación a nivel de Latinoamérica, queriendo saber si otros colegas vivían lo mismo. Los resultados fueron devastadores: el 96% de los veterinarios ha enfrentado algún tipo de violencia: física, psicológica, económica, sexual o cibernética. Estos actos de agresión no solo afectan nuestra seguridad física, sino también nuestra salud mental, nuestra confianza profesional y nuestra estabilidad laboral.
Fue entonces cuando entendí que no estaba sola. Que no solo me pasaba a mí. Y que, más importante aún, esto no es nuestra culpa. Por eso nació PazVet, un movimiento que busca protegernos, apoyarnos y alzar la voz contra la violencia hacia los veterinarios.
Sin embargo, hace apenas tres días, nuevamente enfrenté amenazas. Intentaron manchar mi buen nombre y poner en riesgo mi negocio. Pero esta vez fue diferente. Esta vez no me sentí sola. Sentí el respaldo de mis colegas, de ustedes, quienes me demostraron que juntos somos más fuertes. Gracias por estar ahí en este momento tan difícil.
Hoy más que nunca estoy convencida de que PazVet es necesario. No podemos seguir permitiendo que esta realidad silenciosa siga cobrando un precio tan alto en nuestras vidas. Colega, quiero que sepas algo muy importante: no estás solo, no es solo a ti. Y, sobre todo, no es tu culpa.
Levantemos la voz, apoyémonos mutuamente y pongamos un alto a la violencia hacia los veterinarios. Juntos podemos construir un futuro en el que se respete y valore nuestro trabajo. Porque lo que hacemos por los animales y por las personas merece admiración, no agresión.