Stericlean de Centroamérica es una sociedad costarricense, especializada en la recolección, transporte, tratamiento y disposición final de los desechos hospitalarios, clínicas, consultorios y/o establecimientos que produzcan desechos clasificados como bioinfecciosos, mediante un autoclave con capacidad de una tonelada usando la técnica de esterilización, utilizando equipos de la más alta tecnolo
gía de las marcas Bondtech (esterilizadora) y York Shipley (Caldera). Introducción
En 1973, fueron promulgadas la Ley General de Salud y la Ley Orgánica del Ministerio de Salud, las cuales establecieron como responsabilidad del Ministerio de Salud la definición de la política nacional de salud y la organización, coordinación y suprema dirección de los servicios de salud públicos y privados del país. La Ley Orgánica del Ministerio de Salud estableció la posibilidad de que otras dependencias administrativas desarrollaran acciones preventivas, a lo que contribuyó la reforma de la Ley Constitutiva de la CCSS, que autorizó a esta Institución a coadyuvar en la prevención y la promoción de la salud. Para el Ministerio de Salud de Costa Rica en su condición de Rector del Sector Salud implica “garantizar la salud de la población, estableciendo las condiciones para el cumplimiento de los principios de equidad, universalidad y solidaridad, mediante el ejercicio de la Rectoría sobre las personas físicas y jurídicas relacionadas con la salud, y la ejecución de programas prioritarios, para contribuir al logro de la calidad de vida de la población y al desarrollo del país". Con la aprobación de la Ley 8839 para la Gestión Integral de Residuos, el Ministerio de Salud queda establecido como rector en materia de gestión integral de residuos, lo cual incluye las potestades de dirección, monitoreo, evaluación y control. Concretamente y respecto a los desechos clasificados como bioinfecciosos,mantiene vigencia el Reglamento sobre la gestión de desechos infecto contagiosos que se generan en los establecimientos que prestan servicios a la salud y afines,30965-S promulgado el 3 de febrero del 2003, en los cuales se fundamenta la gestión y operación de Stericlean de Centroamérica S.A.
1. La Gestión de Residuos Infecto contagiosos (Decreto 30965-S)
Costa Rica es reconocida mundialmente como país líder que destaca por el modelo de desarrollo verde que privilegia la conservación ambiental, la creación de parques y refugios silvestres, la protección de áreas marítimas y forestales reservadas al sostenimiento de los ecosistemas en armonía con el desarrollo humano. Sin embargo, el modelo sufre los efectos y consecuencias de una subcultura de consumismo cada vez más arraigada en nuestra sociedad que estimula a usar y tirar una alta cantidad de residuos sin mayor conciencia a los serios impactos en la salud de la población, las aguas, los suelos y a la atmósfera. Los impactos económicos y ambientales negativos en términos de devaluación de suelos o disminución de turismo son las características que ubican a los pueblos en indicadores de desarrollo cada vez más bajos. Los residuos bio-infecciosos (RBI) generados en hospitales y clínicas de salud, clínicas veterinarias, la agro industria, puertos marítimos y terrestres y los residuos farmacéuticos caducos, contienen riesgos y peligros para la salud humana y a los ecosistemas, principalmente por el carácter infeccioso y tóxico que resultan las partículas o componentes del desecho. Por otra parte la presencia frecuente de objetos punzo cortantes y otros en cantidades menores infectados por fluidos humanos y animal, así como los químicos e inflamables y los radiactivos de baja intensidad, están igualmente presentes en estos residuos. Todos los RBI generados en instituciones de salud o centros laborales requieren de un manejo especial para evitar la transmisión de enfermedades por esa vía, para lo cual es necesario un orden de procedimientos y medios materiales, que de forma integrada reduzcan el impacto nocivo a la salud y al ambiente. Los RBI son residuos tales como algodones, gasas, jeringas, guantes, mascarillas, cubre cabezas, agujas, filos de bisturí, cajas petri, catalizadores, o sea, material de uso médico descartable, residuos alimentarios de infecto contagiados o equipos de protección y seguridad ocupacional, todos deben ser tratados o destruidos antes de llegar a un relleno sanitario ya que representan diferentes niveles de peligro potencial de acuerdo con su grado de exposición ante los agentes patógenos.