05/08/2022
Cuando Rubén reta a la gente en sus trasmisiones a enfrentarlo y a poner pruebas en su contra, esto es lo que no quiere que se sepa y por eso tiene a tantas personas bloqueadas. A continuación un testimonio REAL de la experiencia con el entrenamiento del lugar.
"El pasado 2 de octubre 2021 contraté a la Federación Canina ACAN para un entrenamiento de 20 días para mis cachorros Ginebra (Golden, 11 meses) y Sean (Pastor Alemán, 8 meses) ambos en perfectas condiciones de salud y de ánimo. Ese mismo día les deposité 350.000 colones equivalentes al 50% del costo total del entrenamiento por ambos perros y cancelé 25.000 colones adicionales porque vinieron a recogerlos a mi domicilio. Los recibió una muchacha uniformada de nombre Cristina y nacionalidad hondureña, en vehículo de la Federación.
Al cuarto día de estar los perros en la sede que tienen en Guacalillo de Cartago, me enviaron una foto de Ginebra sangrando, indicando que había entrado en celo, situación que no es cierta pues desde la firma del contrato les indiqué que la perra había sido esterilizada a los 5 meses de nacida lo cual constaba en el registro veterinario.
Por tales razones les insistí en que la viera un veterinario de planta para que me diera una explicación calificada sobre el problema que estaba aquejando a la perra. Para no cansarlos con el tema, a mi insistencia le enviaron la foto a alquien que lógicamente en un audio de WhatsApp indicó que no podía saber si era una infección o un golpe. Esto fue en horas de la mañana del día 5 de octubre. Decidí entonces llamar al señor Rubén Rodríguez a su celular, quien fue con quien pacté el servicio.
No sólo me gritó faltándome al respeto como mujer y adulta que soy, sino que me insistía a grito pelado que si yo "no sabía quién era él". y que a partir de ese momento no le importaban los perros y que si no estaba a gusto que fuera a buscarlos. La realidad es que no lo conocía pero sus reacciones violentas fueron su carta de presentación. Llamé a mi veterinaria particular y ella me indicó que el señor Rodríguez estaba muy cuestionado y que la perra podría empeorar de salud si no se le atendía a tiempo.
En virtud de lo anterior, decidí rescindir el contrato a la 1.30 p.m del día 5 de octubre y así lo hice saber por audio y por escrito, indicándole a la srta. Cristina, quien era la instructora, que no desplazaran a la perra a ninguna parte y que yo la recogería al día siguiente a las 9 a.m. que es la hora en que supuestamente reciben a los dueños, para traerlos a ambos cachorros de regreso y llevar a la golden a revisión veterinaria.
Alrededor de las 2 pm al escuchar dicho mensaje, el sr. Rodríguez unilateralmente le dio orden a la funcionaria para que los llevaran a una veterinaria distinta. Esa persona, elaboró a mano un documento diciendo que los perros estaban saludables pero que la Golden debía estar bajo estricta observación. Aún así, a las 5:27 p.m. publicaron videos en Facebook-sin autorización de mi parte ni contrato vigente- de ambos cachorros en pruebas de adiestrabilidad, donde el señor Rodríguez realizó varios comentarios peyorativos contra los perros y la dueña, o sea yo.
Al día siguiente, 6 de octubre, con el carro de mi hijo fuimos a recoger a los perros. Nos recibió un muchacho de nombre Martín, aparentemente de origen venezolano y sin documentación nacional, acompañado por una joven que no se identificó pero que estuvo ilegalmente persiguiéndome con su celular y grabándome en video aunque le indiqué específicamente que no autorizaba que me grabara porque en Costa Rica eso era ilícito. No les importó.
Nos trajeron a los perros un rato después pero no nos dejaban salir si no firmábamos un papel hecho a mano y suscrito por el tal Martín, el cual me negué a rubricar si antes no incluían la fecha en que yo había dado por terminado el contrato el día anterior, a la 1.30 pm para probar que los desplazamientos y videos realizados estuvieron fuera de contrato y sin mi autorización.
Se negaron a dejarnos salir y por tanto, mi hijo les señaló que llamaría a la policía porque nos estaban reteniendo ilegalmente y coaccionando. Nos mantuvieron media hora sin dejarnos ir, prácticamente secuestrados, hasta que por teléfono se comunicaron con el señor Rodríguez, quien era quien les daba las instrucciones y finalmente accedió a que se pusiera la aclaración sobre la ruptura de contrato en la nota de salida. Solo después de esto, pudimos irnos.
A mi perra Ginebra la revisó nuestra veterinaria Laura Flores el día 7 de octubre a las 9 a.m. Ella tiene una infección en la vejiga, un golpe en el vientre, sedimento por deshidratación y un alto grado de estrés. Está tomando antibióticos por 10 días, hubo que inyectarla por el fuerte dolor que sentía y hasta ayer estuvo sangrando por la o***a. Todo ello aparece en exámenes realizados y certificación emitida por la veterinaria.
El pastor también estaba también deshidratado y con mucho estrés aunque no presenta otras condiciones,
He reunido todos los elementos para formalizar esta denuncia y espero que nadie más tenga que pasar por las tenebrosas circunstancias que enfrenté durante los últimos días. Hace varios años, me capacité y fui asesora de prensa de la Organización Mundial de Protección a los Animales, razón por la que puedo afirmar que el señor Rodríguez no es apto para tener contacto con nuestras mascotas y además actúa de forma agresiva y violenta contra los dueños si expresamos preocupación por cualquier circunstancia anómala que detectemos en nuestros perros.
Además, emite criterios veterinarios sin ser un profesional en la materia y no posee un veterinario de planta que actúe en caso de emergencia, razón por la que considero que el Colegio de Veterinarios debería intervenir. E igualmente SENASA ante la cual existen innumerables quejas contra el señor Ruben Rodríguez.
Finalmente, como periodista, no recomiendo a ningún medio de comunicación que le brinde espacio al señor Rodríguez pues es nocivo y falso, amenazador y prepotente y podría perjudicar a otros animales. Adjunto dictamen oficial de las condiciones de salud de mi perra Ginebra, emitido por la veterinaria.
Adriana Núñez Artiles, periodista"