Las técnicas de bloqueo locorregional ecoguiado han mejorado extraordinariamente la calidad de nuestras anestesias y el postoperatorio de los pacientes. En este caso, con una fractura de tibia, se procede al bloqueo del nervio ciático y del nervio safeno, consiguiendo la desensibilización del miembro desde la rodilla a distal. Durante la cirugía, la analgesia es excelente sin tener que recurrir al uso de opioides, y en el postoperatorio, la recuperación es excelente.
La ecografía es una herramienta fundamental en las urgencias. La técnica de AFAST y TFAST, consistente en la revisión de determinados puntos del abdomen y del tórax para comprobar la existencia de líquido libre es una técnica muy rápida y útil, no invasiva, y que se lleva a cabo habitualmente en menos de 5 minutos mientras el paciente se está estabilizando. Cuando el veterinario tiene experiencia en esta técnica, en muy poco tiempo puede obtener gran cantidad de información en pacientes traumados o en shock. En el caso de esta perrita, que ingresó con hipotensión, taquipnea y en estado de shock, a los pocos minutos se diagnosticó el derrame pericárdico y el consiguiente taponamiento pericárdico. La pericardiocentésis permitió evacuar el líquido, que resultó ser sangre, y recuperar la función cardíaca normal, con una pronta recuperación.
En las patologías crónicas de vías altas es necesario muchas veces recurrir a la rinoscopia para el diagnóstico. En este caso, un gato de 3 años con patología respiratoria crónica, con patrón bronquial al que se le hizo lavado broncoalveolar y el cultivo dió positivo a klebsiella y staphilococo, tras el tratamiento mantenía disnea inspiratoria y estridor. Nuestra compañera Cristina, del SEV Costa del Sol, realizó la rinoscopia en nuestro centro, diagnosticándose una estenosis nasofaríngea. Los patógenos que encontramos muchas veces en el pulmón son secundarios a patologías oronasales, y por tanto, no son el origen del problema. En este caso, como se aprecia en el vídeo, se procedió a la dilatación de la estenosis mediante el uso de balón.
Esta es la historia de Kenji, un precioso gato que la protectora Vicar Can rescató hace un año. A resultas de una aplasia bilateral de cabeza femoral, y de una luxación patelar medial bilateral, era incapaz de andar usando sus extremidades posteriores, hasta el punto de llegar a caminar con el cuerpo en posición vertical apoyándose solo en sus miembros delanteros. En un primer lugar se procedió a la exéresis de ambas cabezas femorales, y en una segunda intervención, se corrigió la luxación mediante la transposición de las crestas tibiales y la profundización del surco troclear en ambas rodillas. Seis meses después, gracias a las intervenciones quirúrgicas y a las atenciones de sus cuidadoras, Kenji hace una vida perfectamente normal y usa sin ningún problema las extremidades posteriores para correr y saltar....
Vídeos de ecografía de derrame pericárdico y ascitis asociada
Esta gatita, de dos años de edad, acudió a la clínica con un historial de crisis convulsivas de varios días de duración. En la anamnesis, los propietarios referían que llevaba un tiempo menos activa, con períodos de letargia, y que 4 o 5 días antes había comenzado a presentar convulsiones, que fueron tratadas en su centro veterinario de forma sintomática, suponiendo que estaban originadas por una intoxicación, sin que remitiesen. En la exploración física la paciente presentaba mucosas hiperémicas y congestivas y ataxia. En el hemograma, su hematocrito estaba por encima del 70%, por lo que se sospechó de eritrocitosis. Para descartar que fuese secundaria, se valoró la EPO, que estaba en niveles normales, y se descartaron patologías cardiopulmonares , por lo que el diagnóstico fue de policitemia vera. En estos casos, la disminución del contenido de plasma en la sangre hace que la circulación sanguínea sea más lenta, disminuyendo el aporte de oxígeno al sistema nervioso, lo que origina las convulsiones. Se realizó una flebotomía, extrayendo unos 50 ml de sangre, lo que disminuyó el hematocrito a valores normales, con la consecuente desaparición de la sintomatología neurológica. El tratamiento posterior en estos casos se hace con hidroxiurea, y un control periódico del hemograma.
