14/03/2021
COMO APRENDER A ELEGIR UN PIENSO DE BUENA CALIDAD PARA SU PERRO (segunda parte)
Dentro de las características propias de cada pienso existen tres factores a tomar en cuenta:
1. Digestibilidad y palatabilidad del pienso:
La digestibilidad y palatabilidad del pienso que elijas para tu perro también son factores importantes a tener en cuenta.
La digestibilidad suele ir ligada a la calidad del pienso y hace referencia al proceso de digestión del pienso por el sistema digestivo. Si es de alta digestibilidad, el aparato digestivo del perro lo digiere fácilmente y será capaz de aprovechar al máximo los nutrientes. Por el contrario, una comida de baja digestibilidad puede dar lugar a digestiones pesadas, molestias y, además, se dejarán una buena cantidad de nutrientes sin absorber por el organismo. Un pienso de alta digestibilidad suele dejar poco residuo y viceversa, por lo que es algo que se puede detectar en la cantidad de c**a del perro. Si tu perro come un pienso de alta digestibilidad y defeca demasiado o líquido o con poca consistencia puede que tenga algún problema digestivo o intestinal.
La palatabilidad se refiere al sabor, olor, textura y otras características organolépticas del pienso. Este factor es importante pues influye en que el perro acepte el pienso o, por el contrario, lo rechace y no coma de forma adecuada.
2. La calidad el pienso, ingredientes y etiquetado:
Aprender a leer las etiquetas del pienso, identificar los ingredientes, conocer sustancias nocivas o de mala calidad o conocer la composición óptima según las características de tu perro es finalmente el factor que nos hará decidir comprar una marca de pienso u otra.
Hay que leerse las etiquetas para buscar orientaciones sobre edad y tipo de perro al que va dirigido el pienso y así satisfacer los factores que hemos comentado hasta ahora. Esto se completa con la lectura y comprensión de la fórmula del pienso cuyos ingredientes son la clave de la calidad del pienso.
El etiquetado de los piensos han de llevar cierta información de forma obligatoria y atendiendo a ciertos criterios. Uno de estos criterios es que han de aparecer todos los ingredientes en orden descendente según la cantidad en la que están presentes en la fórmula. Aunque la cantidad exacta no es obligatoria, si aparece el trigo antes que el pollo en la lista de ingredientes, significa que lleva más trigo que pollo.
Si estás leyendo la etiqueta de comida húmeda para perros, tienes que saber que el agua siempre ocupará el primer lugar.
En este sentido podemos distinguir un pienso de buena calidad si los primeros ingredientes de la lista lo componen la: carne, pollo y proteínas de origen animal. Si hay proteínas de origen vegetal, por ejemplo soja, el pienso será de menor calidad que uno que lleve carne o proteínas animales. Las proteínas de soja son baratas y por ello son incorporadas a piensos pero, aunque sean proteínas, tienen menor digestibilidad para los perros.
Seguidamente deberían aparecer los hidratos de carbono, normalmente como cereales. Entre los más utilizados están el trigo, maíz y arroz. El arroz suele ser mejor y, en general, hidratos de carbono medios.
Después puedes encontrar sales minerales, vitaminas y otros nutrientes adicionados a la fórmula. Finalmente estarán los conservantes, colorantes y otros aditivos.
Existen muy buenos piensos en el mercado, de marcas mucho menos reconocidas que presentan en su composición, un elevado porcentaje de productos cárnicos y, sin cereales (grain free) o low grain, ajustados a la dieta natural de un perro.
3. El precio:
El precio es quizás el único, o al menos el más obvio, de los factores en la elección del pienso para el perro que depende directamente del dueño. Aunque en principio puede parecer muy fácil atender a este factor, en realidad no lo es. Y es que no basta con decir "este puedo pagarlo y esto no", hay que profundizar un poco más.
Si comparamos precios de piensos para perro sin tener en cuenta el resto de factores que buscamos como calidad y características específicas para nuestro perro, la comparación no tendrá sentido. No siempre el pienso más caro es el mejor, por ello hay que comparar el precio sin olvidar estudiar sus ingredientes. Lo ideal sería encontrar un equilibrio entre calidad y precio, sobre todo en la edad adulta del perro, mientras que en cachorros y edades avanzadas debería primar la calidad por encima de todo.