12/05/2022
HEMATOMA AURICULAR U OTOHEMATOMA
Fuente: Diagnóstico Veterinario.
El otohematoma es un proceso inflamatorio que afecta a la cara interna del pabellón auricular de origen traumático. Algunos autores hablan de un origen inmunomediado e incluso autotraumatico, lo cierto es que el hecho de que existan diferentes tecnicas para tratarlo y de que ninguna sea efectiva al 100% podría explicar las diferentes causas que pueden provocarlo.
Es muy importante valorar el otohematoma en el perro y en el gato como un signo secundario de un conjunto de afecciones originadas en la necesidad de sacudir la cabeza o rascarse con las patas. En la mayoría de los casos, existe una otitis externa o media como causa principal. Los cuerpos extraños (espigas) también se deben considerar en el diagnóstico etiológico del proceso, así como el prurito intenso de una otoacariasis.
Drenaje del contenido del otohematoma en el perro
Sin entrar en los detalles del procedimiento quirúrgico, que se pueden consultar, en forma más extensa, en la bibliografía especializada, se describen a continuación, distintas formas de resolver un otohematoma, desde el punto de vista de la clínica diaria.
En todos los casos se realiza una limpieza profunda del pabellón auricular y del conducto auditivo externo, siempre bajo sedación, ya que ésta facilita la exploración, limpieza y posterior drenaje del contenido.
Salvo excepciones, nunca se rasura la parte externa del pabellón auricular, por las molestias que origina al salir el nuevo pelo que podrían llamar la atención del animal y comenzar con un nuevo rascado o sacudida de la cabeza, por no desproteger la zona (sobre todo en verano), por la alopecia post rasurado que aparece en ciertas razas, y porque con una limpieza a conciencia con soluciones desinfectantes con efecto espumoso, previo a la desinfección se logran niveles de limpieza muy aceptables para la injuria mínima que representa, el paso de la aguja de sutura, para el epitelio sano.
Métodos de anular el espacio mu**to del hematoma
Una vez realizado el corte para el drenaje, se pueden realizar puntos perforantes (siempre paralelos al eje mayor de la oreja) sin ningún tipo de complemento, con el objetivo de eliminar el espacio mu**to donde estaba la colecta de líquido; se pueden utilizar dispositivos absorbentes ó bien, introducir pequeños recortes de drenaje para que la sutura asiente sobre el plástico y no sobre la piel directamente. Este tipo de sutura (sutura con capitones), las utilizamos con mucha frecuencia en heridas que deben soportar una cierta tensión.
PUNTOS A TENER EN CUENTA EN LA RESOLUCIÓN DE UN OTOHEMATOMA
1. Diagnosticar y tratar el origen del problema.
2. En la mayoría de los casos, el otohematoma es consecuencia de una otitis no diagnosticada o mal curada.
3. No todos los otohematomas se originan en otitis. Puede existir fragilidad capilar o un traumatismo como causa principal.
4. Los otohematomas no se solucionan drenando el contenido con aguja y jeringa. Solo se dilata el problema.
5. Todos los otohematomas pueden recidivar si no se evacua el contenido a conciencia.
6. Para evacuar el contenido se debe realizar una incisión que no tienda a cerrarse con el transcurso de los días.
7. Para evitar esto último, lo ideal es retirar una pequeña porción de los bordes de la herida y dejar que cicatricen por segunda intención.
8. Se debe proteger siempre la herida, al menos las primeras 48 hs con un vendaje y con collar isabelino, y solo con collar isabelino durante 5 a 7 días (hasta la extracción de los puntos como mínimo) ya que una muy buena cirugía y una técnica impecable, se puede transformar en un fracaso si obviamos los cuidados de enfermería posteriores.
9. Con el fin de evitar pérdidas de irrigación y colapso de los vasos principales, se debe tener en cuenta que la posición de los puntos siempre debe ser paralela al eje longitudinal de la oreja, y la tensión debe ser la mínima necesaria para mantener la piel interna en contacto con el cartílago.
Es importante tener en cuenta que si el hematoma se organiza, el pabellón corre el riesgo de retraerse y producir una deformación permanente en la arquitectura normal de la oreja (“oreja arrugada”, “oreja de repollo”, “oreja de coliflor”), de ahí la importancia de realizar un abordaje diagnóstico y terapéutico rápido y eficaz.