El perro es un animal social, un cazador de equipo cuyo patrón de comportamiento no deja lugar para la soledad o la individualidad. Para tu perro, vivir en grupo no es una opción, es una necesidad fundamental. De forma natural, va a presentar afán de cooperación y de unión, ya que es una de sus fortalezas evolutivas. Por esto, se adapta sin dificultad a las estructuras familiares humanas, resulta un excelente animal de compañía, y disfruta trabajando en equipo.
La obstrucción urinaria en gatos, es una afección dolorosa y potencialmente mortal que suele afectar a los gatos macho. Si tu gato macho tiene obstrucción urinaria, su uretra (el conducto que drena la orina desde la vejiga hasta el pene y fuera del organismo) está obstruida por un tapón de minerales y células. La obstrucción urinaria en gatos macho es bastante común, especialmente entre los ejemplares esterilizados; por lo tanto, es fundamental que los propietarios presten atención a cualquier síntoma de esta afección; El gato intenta orinar en vano repetidas veces, o bien solo expulsa unas gotitas, a menudo mezcladas con sangre. La vejiga se llena de orina continuamente desde los riñones y va aumentando de tamaño al no poderse vaciar con normalidad. El gato se muestra intranquilo y suele dar señales de dolor en sus intentos de orinar
Cuanto antes reciba el tratamiento adecuado, más probabilidades tendrá tu gato de recuperarse de forma saludable.
A lo largo de estos meses, hemos recibido un buen numero de pacientes con problemas hepáticos, algunos con varios días de evolución porque los síntomas que presentan pueden confundirse con otras muchas alteraciones. Es importante conocer los síntomas de los problemas de hígado que se pueden pasar por alto, al ser similares a los de otras dolencias. Entre ellos, se encuentran:
Pérdida de apetito.
Pérdida de peso.
Vómitos o diarrea.
Aumento de la sed.
Paseos inestables.
Mayor necesidad de orinar.
Confusión.
Ojos, lengua o encías amarillentas (ictericia).
Signos de debilidad.
Sangre en la orina o las heces.
Convulsiones.
Ascitis (acumulación de líquido en el vientre).
Ante cualquiera de estos síntomas visita a tu veterinario de confianza, para un diagnóstico y atención oportunos.