Mis primeros pasos en la Veterinaria.
Nací en una familia de Veterinarios de renombre. Crecí yendo a la veterinaria a ver a mi papá Francisco Cavero Robbiano y a mi tío Pepe Cavero Robbiano curar a miles de animales con métodos super innovadores para la época. Ellos siempre fueron mi ejemplo a seguir.
Cuando cumplí 10 años, empecé a ayudar oficialmente en las tareas cotidianas de la veterinaria de mi papá para ganarme la propina de la semana... bañe perros, limpie caniles, cambié a los perros enfermos y fui el asistente de mi papá. Sin embargo, para mi no era un trabajo, ya que disfrutaba levantarme los Sábados sabiendo que iba a poder jugar con perritos todo el fin de semana.
Con los años mi amor hacia la veterinaria fue creciendo y cuando llegó el momento de escoger una carrera, esta ya había sido escogida por mi corazón años atrás sin haberme dado cuenta... Nunca dude que la Veterinaria fuera mi vocación.