05/13/2021
HISTIOCITOMA CUTANEO CANINO
El histiocitoma cutáneo canino es un tumor de comportamiento benigno, y elevada incidencia en perros jóvenes menores de 3 años, aunque puede presentarse con menor frecuencia en perros de mayor edad. Los perros de raza suelen verse más afectados que los mestizos. Existe una elevada predisposición en el Bóxer y Dachshund.
Clásicamente, se ha denominado al histiocitoma cutáneo canino como tumor “botón” por su característica presentación. Morfológicamente, se presenta como una ligera elevación de la piel, redondeado o ligeramente ovalado con un diámetro que no suele superar los 3 cm y, a menudo, alopécico. Es de crecimiento rápido, y unido al hecho de que suele causar alopecia en la zona de la lesión es un tumor muy visible, siendo causa de alarma para los propietarios, que acuden al veterinario muy preocupados buscando una solución.
Habitualmente, se presentan como masas solitarias, aunque en escasas ocasiones son múltiples. Los lugares más frecuentes de presentación son la cabeza, sobretodo el pabellón auricular y sus proximidades; y el cuello, aunque también pueden aparecer en extremidades y con menor frecuencia en el tronco.
Son masas proliferativas autolimitantes, y a pesar de su rápido crecimiento, en pocos meses involucionan dejando la piel intacta y sin secuelas. Los problemas que pueden acarrear son principalmente estéticos; y la aparición de ulceraciones con posibilidad de infecciones leves locales producidas por el lamido, o por traumatismos (roces) en la lesión. Tales infecciones locales pueden ser tratadas con antibióticos tópicos. Sin embargo, la mayoría de los autores recomiendan la exéresis quirúrgica del tumor, siempre y cuando su localización lo permita, para evitar estos problemas asociados. La resección quirúrgica es curativa, siempre y cuando se practique con amplios bordes.
La obtención de muestras para su estudio citológico se realiza mediante PAAF, o a partir de un raspado sobre la superficie de corte de la masa una vez extraída mediante cirugía. A nivel microscópico se observa una abundante población de células redondas de tipo histiocitario (los métodos diagnósticos más actuales han determinado que son células de Langerhans) con escaso estroma, y no muestran cohesividad celular. Los núcleos son redondos o ligeramente ovalados y de posición excéntrica. Muestran un citoplasma, generalmente pálido, o ligeramente basofílico. Algunos histiocitomas muestran numerosas figuras mitóticas, aunque de aspecto normal. En ocasiones, se observa un infiltrado linfocitario y plasmocitario variable que se asocia a la regresión del tumor.