23/03/2024
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¿Qué pasó el 5 de octubre de 1582? ¿o el 13? Nada. Estos días no existieron en el calendario. El año 1582 fue la fecha en la que del jueves 4 de octubre se pasó al viernes 15 de octubre. Pero, ¿por qué ocurrió esto?
En aquella época, el mundo se regía por el calendario juliano, aprobado por Julio César en el 46 antes de nuestra era. Según este anuario, el año terrestre era de 365 días y 6 horas, y se establecía un año bisiesto cada 4 años.
Sin embargo, este calendario era más largo de lo debido, pues el movimiento de traslación del planeta Tierra alrededor del Sol se produce en 365 días, 5 horas, 48 minutos y 45 segundos. Se perdían, entonces, 11 minutos y 14 segundos anualmente. Esto daba lugar a que el mundo se atrasara un día cada 130 años, un desfase en el tiempo.
De esta forma, en el siglo XVI el desfase ya llegaba a los 10 días. De hecho, las fechas destacadas se iban adelantando en el calendario, así el equinoccio de primavera cayó el 11 de marzo en lugar del 21.
Se puso en marcha una comisión científica formada por el astrónomo Christophorus Clavius, el cosmógrafo Ignazio Danti, el matemático Pedro Chacón y el cronista Luis Lilio.
De este modo se modificó la regla de los años bisiestos. Estos se repetirían cada 4 años, pero con excepción. No serían bisiestos los múltiplos de 100, salvo los que a su vez fueran divisibles por 400. Así, el año 2000 fue bisiesto, mientras que 2100 no lo será.
Gregorio XIII promulgó la entrada en vigor de este nuevo calendario. Además, ordenó que ese mismo año 1582 se pasara del jueves 4 de octubre al viernes 15. Desaparecieron, de golpe, 10 días del calendario para poder, así, corregir el desfase.
Italia, España, Portugal y Polonia, entre otras zonas, aplicaron el calendario gregoriano el mismo día 4 de octubre de 1582. Sin embargo, no todos los países del mundo lo fijaron de inmediato. Este es el caso de Inglaterra y sus colonias que lo adaptaron hasta 1752; Japón en 1873; y Grecia, en 1923.
El caso más llamativo es el de Rusia, que no se rigió por el calendario gregoriano hasta 1918 con la llegada al poder de Lenin. Esto provocó que la Revolución Rusa tuviera como fecha referencial el 25 de octubre de 1917, según el calendario juliano. Mientras que actualmente se conmemora el 7 de noviembre.
En cualquier caso, el calendario gregoriano es el que nos rige actualmente. Aunque aún sigue habiendo un error de apenas medio minuto por año, lo que supone el retraso de un día cada 3300 años.